¿Cómo saber si me estoy poniendo de parto? Te damos las claves
Las mujeres dan a luz entre las 37 y 41 semanas de gestación. Ahora bien, es imposible saber con certeza cuál será la fecha del parto, a menos que esté inducido o programado.
Previamente al inicio del parto -estamos hablando de horas o días- se pueden dar algunas señales que nos indican que no falta demasiado tiempo para el final del camino que se empezó nueve meses atrás. Son lo que se conocen como pródromos de parto, son falsas alarmas pero que deben ponernos en alerta porque son la señal de que el parto se acerca.
Los pódromos de parto
Los pródromos de parto son contracciones que preparan el cuello uterino para el trabajo de parto. Pueden ser molestas, pero no dolorosas. Son variables en cada mujer, en algunas pueden tener lugar un par de semanas antes mientras que en otra apenas unas horas previas al nacimiento del bebé.
Los pródromos del parto más comunes son las contracciones del útero con un dolor similar al de la menstruación y que pueden apreciarse como un endurecimiento progresivo del abdomen.
Son normales a partir del tercer trimestre y en ningún caso nos indican el inicio del parto. La pérdida del tapón mucoso también es posible sin que el parto haya comenzado, aunque es un signo evidente de que cada vez queda menos tiempo.
Por último, también existe la posibilidad de manchar levemente de sangre después de la visita a ginecología en las últimas semanas de embarazo.
¿Cómo saber cuándo llega el momento del parto?
Básicamente, hay dos formas de saber que ha llegado el día del parto:
- La primera son las contracciones: el aumento de producción de la hormona oxitocina hace que la musculatura uterina se contraiga. Para que sean de parto, estas contracciones deben ser dolorosas –cada vez en aumento– con mucha regularidad por ejemplo de una cada 5 minutos, y persistentes. Aunque cada caso es un mundo, suele decirse que si es el primer parto, antes de ir al hospital podemos llegar a estar dos horas con contracciones regulares y dolorosas cada tres o cuatro minutos.
- La segunda manera de saber que el parto se desencadena es con la rotura de aguas: Si son claras y sin color, y tampoco tenemos contracciones, podemos tardar unas pocas horas en llegar al hospital, aunque se aconseja acudir lo antes posible. Por el contrario, si son verdes, amarillentas o muy oscuras, pueden ser señal de sufrimiento del bebé y deberás acudir al hospital lo antes posible.
¿Cómo paliar el dolor de las contracciones del parto?
Para terminar este artículo, te ofrecemos algunas recomendaciones para paliar el dolor de las contracciones de parto. Por ejemplo, conocer las diferentes técnicas, también las no farmacológicas, para aliviarle, como la libertad de movimientos y posiciones de la mujer durante el parto o el uso de agua caliente en la dilatación.
Las técnicas de relajación, masaje y respiración o el uso de pelotas durante la dilatación contribuyen a disminuir el dolor. Incluso la distracción puede ser una buena aliada para poder soportarlo mejor.
Esperamos haber podido ayudar a despejar una de las dudas que más interés suscitan entre nuestras pacientes embarazadas.
